viernes, 11 de julio de 2008

Soñando una canción...

Hoy me siento con el alma a flor de piel, como si quisiera salir en un suave suspiro de mi cuerpo, como si quisiera volar libremente por el cielo de un mundo mejor, de un sueño cada vez más presente.

Me siento como si necesitara liberar mi corazón de las cadenas de la rutina y sumergirme en lo más profundo de la misma realidad, dejarme envolver por una melodía inaudible y danzar con el Espíritu del Viento, iluminado y abrigado por pequeñas hadas que danzan con cada movimiento de la brisa.

Siento las ansias de reposar sobre el pasto y mirar al cielo, bajo la sombra de un gran árbol, mientras converso tranquilamente con el Espíritu de la Tierra, creando sueños juntos bajo las cálidas caricias del Sol, sintiendo como cada brote crece lenta y esperanzadoramente a mi alrededor.

Sueño con el fraternal abrazo del Espíritu del Fuego que nace del mismo Sol, acompañándome como si fuese mi más fiel amigo, aquél que hubiera conocido desde la infancia, aquel con el que puedo gritar mis más desesperados rencores y susurrar los más cálidos anhelos sin importar el momento o el lugar, pues siempre está allí, de un modo u otro...

Anhelo la tranquilidad del Espíritu del Agua, quien está presente tanto para un brillante día de juegos como para un tranquilo y soñador día lluvioso. Esa refrescante tranquilidad que es capaz de dar la oportunidad de pensar en paz y lograr aquellas metas impensables o crear nuevos mundos para la inquieta mente de un soñador. Aún cuando traiga la nostalgia, sé que me puede dar la fuerza de seguir adelante.

Es entonces cuando veo a la grandiosa Gaia sonriéndome y diciéndome que siga mi camino, que todo saldrá bien. Pero no puedo olvidar aquella compañía, pues nunca desaparece.
Es entonces cuando miro todo el gran y tranquilo valle en el que he estado "aparentemente solo" y miro en mis recuerdos la realidad que existe en mí ser...

Me dirijo camino a mi hogar y sonrío a los ojos de mi amada, para tomarle la mano e invitarla a danzar aquella canción que nunca existió, pero que será siempre nuestra canción... La canción de la madre que nos vio crecer y que sigue poniendo su fe sobre nosotros. Susurro las más tiernas palabras que se me ocurren y la llevo tomada de una mano hacia el valle donde la Vida dejó su verdadera marca...

2 comentarios:

Folkenio the Mini Painter dijo...

Ándale, Ore, que cada vez que visito este blog el personaje del Gamberro se updatea totalmente!!!

Me gustó la idea, en especial por el hecho de "la canción"... Carajo, que te inspiraste!!! Sigue así, viejo, que El Gamberro necesita más diálogos de ese estilo!!

Folkenio, Proud Cap'n o' The Folkenizer!!

PD: DumbQuest... JEJEJEJEJEJJEE!!!!!!

Juanizio Farkan dijo...

Sigues soñando?
yo acabo de despertar, de empezar a mirar las cosas como creo que son, de mirar mis propias manos. Pero tampoco perdi la facultad de soñar, aun sueño con escalar las grandes cumbres de este mundo, y tambien abrazar al espiritu del fuego, y ver a nuestra madre Gaia...

es increible que mientras tu eres un gran soñador, que su sueño es vivir en un mundo de sueños (esa frase está en mi agenda de dibujos aun guardada), yo soy un realista que añora enfrentar la realidad con ojos que ningun mortal ha poseido...

Gracias por el comentario, me gusto caleta, no sabes cuanto me agrada poder saber que a lo menos, de las cientos de personas que saben que tengo blog, a lo menos 2, me dejen sus comentarios para la eternidad (muchos mas me han comentado, pero por mail, pues les de cosita el publico XD), tienes razon, no seremos los grandes compinches de la vida (como el lazo que me une con mi hermano folken), pero por lo menos gracias a tus entradas y comentarios, te considero como un amigo, pq tenemos una manera bastante similar y a la vez opuesta de ver las cosas... son pocas las personas que conozco que vean las cosas asi, y que mas encima les guste escribir tanto...

Todos tenemos muchas canciones, sobre todo esa cancion que nunca existio, esa cancion sin nombre, una cancion que tal vez termine, cuando se acabe nuestra vida, cuando nuestro corazon deje de marcar el compaz... esa eterna cancion que siempre tarareamos, y que su ritmo siempre es acorde a lo que ocurre... por algun motivo mi cancion ahora es muy rapida, energica...

será por que desperte, por que estoy madurando, en mi valle, el cual está teñido por la luz de luna...

saludos
y si alguna vez, vienes a colina, avisame y si quieres me pasas a ver, te invito a una taza de te (no creo que tomes cerveza jaja)