domingo, 24 de junio de 2007

Un Pequeño Cuento...

"Un Pequeño Cuento" ©
Hecho por mí el 17 de Octubre del 2005

Había una vez un joven príncipe, proveniente de un reino muy lejano.
Era simplemente un muchacho, soñador como pocos hay, y talentoso como otros.
Le encantaba viajar y estar junto a la Naturaleza, siempre bajo un árbol o frente a la brisa del viento.
Sus padres eran muy cariñosos. Eran muy buenos reyes y cuidaban bien de su pueblo.

Pero el tiempo pasó...y tuvo un hermanito menor.
El joven príncipe creció y se volvió todo un joven, lleno de sueños y aspiraciones.
Se dio cuenta que, a medida que crecía y pasaba el tiempo, sus padres iban volviéndose algo más fríos.

-Él no querría hacer esas clases de cosas - escuchaba. - A él no le gusta tales cosas.
-Por eso esperamos que tú, nuestro pequeño hijo, seas mucho más capaz que él.
-No caigas en los errores que él cae...después de todo, aún es muy bueno.
-Pero aún así...él quiere hacer lo que esté en sus sueños y en su corazón...o eso dice.
-¿Entiendes a qué se refiere?
-Ni idea.

Entonces se dio cuenta...sus padres no lo comprenden.
Con el paso del tiempo, mientras más aumentaba la frialdad de sus padres hacia él, más creía que en realidad era una carga para ellos.

"No quiero ser una carga...pero no sé qué hacer" - pensaba.

Pero entonces...le llegó una única idea: se iría y jamás volvería.
Entonces, en una noche de Luna Llena, esperó a que todos se quedaran dormidos y se vistió con unas ropas algo simples, que no mostraban su estado como príncipe. Caminó descalzo por el castillo, para no hacer ruido y, una vez afuera, se puso unos botines de viajero.
Pasó ligeramente por los terrenos para que nadie se diera cuenta de su presencia.
Se dejó llevar por el brillo de la Luna Llena...hasta que halló un bosque en el cuál poder dormir.
Era un bosque que jamás había visto, en especial porque nunca salió de las tierras de su reino.
Era un bosque lleno de diversos árboles; algo oscuro, pero a la vez muy brillante.

Caminó durante un tiempo, hasta que se encontró con lo que parecían Elfos.
Altos y jóvenes elfos, llenos de vitalidad y con unos ojos brillantes como la misma Luna Llena.

-¿Somos los guardianes de estos bosques...Quién sois vos? - dijo uno.
-Soy un joven viajero, proveniente de tierras muy lejanas - dijo, tímidamente. - Estoy buscando un lugar en dónde pasar el resto de la noche y descansar.
-Mmm...Ven, consultaremos qué hacer con los Altos - dijo otro.

Caminaron entre el espeso bosque hasta un lugar muy extraño: era como una ciudad entre árboles.
Las casas estaban construidas entre y sobre los árboles, a la vez que estos los envolvían. Esta ciudad tenía sus murallas y sus pasillos, como cualquier ciudad.
Dos Elfos, un hombre y una mujer, los cuales se podían distinguir fácilmente por sus ropas y sus coronillas, se acercaron a mí con una leve sonrisa.

-Su Majestad - dijo uno de los guardias. - Este joven dice ser un viajero en busca de un lugar de descanso.
-Pues así veo - dijo la Alta Elfa. - No creo que venga con malas intenciones, ¿verdad? - dijo, mirando al príncipe hacia los ojos.
-Así es, su Majestad. He viajado de tierras muy lejanas toda la noche y quisiera descansar un poco.
-No veo problema - dijo el Alto Elfo. - Descansad donde plazcáis.

Así, el príncipe dio sus debidas gracias y se acostó cerca de una fuente que había al centro de la ciudad.
Pasó la noche tranquilamente, hasta que un sonido lo despertó de repente. Era una jovencita...debía tener su edad aproximadamente.
Era hermosa, y el dorado amanecer resaltaba su belleza.
El príncipe, maravillado, fue a ver qué estaba haciendo y la acompañó.
Rápidamente comenzaron a conocerse y a pasar un agradable momento juntos...pero llegó un momento en que él no soportaba el sueño y le pidió que la acompañara a dormir un poco.
Ella asintió contenta, pues también tenía algo de sueño...pero, al despertar, el príncipe se vio solo y quedó obligado a aceptar su soledad.
Se despidió agradecido de los Altos Elfos y siguió su camino.
Pero, antes de que saliera del bosque, llegó corriendo un mensajero.

-Esto es un regalo de su Majestad - le dijo. - Me ha dicho que ud sabrá cuando usarla debidamente.

Traía una espada del tamaño justo para que el joven la manejara.
El príncipe la desenvainó y la observó bien. Era muy ligera y de una forma muy fina, y su hoja brillaba con un tono azul que soltaba estrellas al moverse.
Agradeció como pudo, tomó la correa y se la puso en la espalda.

Pasó el tiempo y viajó bastante por los campos y bosques.
Se acostumbró mucho a la Paz de los paisajes al aire libre...pero aún así algo le hacía mal.

"Estos paisajes...esta vida...no la cambiaría por nada" - pensaba. - "Pero, aun así, no soporto la Soledad..."

Pero, un día extraño, llegó a un lago. Era un gran y cristalino lago, rodeado por unos cuantos árboles y una espesa neblina.
Se sentó cerca de la orilla del lago a descansar.
Cuando se estaba quedando dormido, sintió como si alguien se acercara a él y lo observara fijamente. Abrió los ojos y se encontró con unos ojos negros mirándolo fijamente.
Era una muchacha. Era un poco más joven que él, tenía los cabellos largos y negros, una falda negra y una sonrisa muy bella...pero extraña.
Ella se levantó y se puso a jugar, volvió a acercarse a él y lo tomó de la mano para jugar con él.
Rápidamente el príncipe comenzó a ser atraído a ella por su alegría y su inocencia.
Pasó el tiempo, y cuando ya estaban cansados de jugar, el príncipe se acercó a ella y le preguntó:

-¿Sabes? Estoy en un viaje para encontrar un lugar tranquilo - le dijo. - ¿Querrías acompañarme?


La muchacha se levantó y corrió unos pasos más allá; se volteó y lo miró con una sonrisa juguetona.

-No, no quiero. No me interesa acompañarte, solo quería jugar.

El joven príncipe se sintió tan mal, porque hasta entonces no halló ninguna compañía, que pensó que su Destino era vivir eternamente solo.
Se despidió de ella, tratando de ocultar su tristeza, y se fue.

Pasaron meses caminando solo, entre bosques y ciudades, entre plantas y personas, pero no le dirigió palabra alguna ni mirada a lo que lo rodeaba. Solo veía su camino y las cosas que hacía, siempre con una mirada triste y perdida...
Había momentos en el que pensaba suicidarse, no podía soportar la idea de que tendría que vivir solo...hasta que finalmente se acostumbró al dolor, pero no así al pensamiento.

Pero, un día Predestinado, llegó al centro de un bosque muy hermoso, lleno de flores de todas clases y siempre calido por la Luz del Sol.
Caminó un poco y de repente vio a una angelita sentada bajo un árbol. Sus alas eran obscuras y se veía muy triste.

"Es muy hermosa...y su rostro parece representar mi edad" - pensó. - "Pero dudo mucho que alguna vez quisiera acompañarme."

Se acercó a la angelita y le preguntó por qué estaba triste.

-"Es que estoy muy sola...Y no soporto la frialdad que produce en mi corazón..."

Pero, cuando iba a comenzar a darle ánimos, llegó un Elfo...pero era extraño, tenía una apariencia algo obscura.
Entonces, ambos acompañaron a la angelita y le alegraron su día.
Pasaron juntos unos días, pero la angelita y el Elfo pasaban más y más juntos con el pasar del tiempo...hasta que ya era notorio: eran una pareja de enamorados.
El príncipe se sintió muy contento porque la angelita ya tenía compañía y sus alas volvían a tener su hermoso color blanco...pero también estaba muy triste porque sentía algo de celos al ver tal pareja y él aún solo como en un principio.

Una mañana, sin que se dieran cuenta, él se fue a caminar. Pasaron meses, y parecía que nadie se preocupó de él...pero...sin saber por qué, prefirió volver al bosque a ver como estaba la angelita.

Cuando llegó, la vio sola y aún más triste que la primera vez que la vio.

-¿Qué te pasó? - le preguntó. - ¿Por qué estás así?
-Es que mi novio no era lo que esperaba y decidimos separarnos - contestó. - Y la verdad es que, pese a que terminé odiándolo por su forma de ser, aún no puedo olvidarlo...y me duele.

El príncipe se sintió tan disgustado al darse cuenta de como defraudaron a aquella angelita, que corrió en busca del Elfo...pero ella le rogó que no la dejara sola.
Él, preocupado por aquella Dama que le había quitado el sueño por tanto tiempo, decidió quedarse a su lado y confortarla en lo que pudiera.

Así pasó el tiempo.

Construyó un lugar para que ambos vivieran y se conocieron hasta donde pudieron.
Tal era la compañía que se entregaban, que no dudaron en decirse los sentimientos que comenzaron a tener por el otro.
Pero, un día, el Elfo volvió. La angelita se puso muy triste porque quería solamente olvidarlo...pero no pudo.
Ella fue a conversar con él...dejando al príncipe en la cabaña.
El príncipe se sintió tan mal, tan atemorizado al pensar que ella solo estaba con él para esperar a ese Elfo...entonces, se dio cuenta:

"Los Elfos nunca son así" - pensó rápidamente. - "Entonces... ¿no es un Elfo?"

Algo impresionado, se acercó a la pareja.
Vio como su amada angelita estaba triste y como el "Elfo" la miraba con una mirada dulce muy forzada.
Se acercó por la espalda del "Elfo" y desenvainó su espada...y lo atacó.
Tal era la agilidad del agredido que salió con un leve corte por el costado...pero tal fue el dolor producido por la Espada, que mostró su verdadera imagen: la imagen de un vil y traicionero demonio.
Asustado, el demonio se fue.
Pero eso ya no le importaba al príncipe, fue a abrazar a su amada y a llevarla a la casa.
La pobre angelita se sentía tan mal por haberse "enamorado" de un ser así, que su espíritu se rompió por completo y quedó sin voluntad de existir.
Pasó muchas horas tratando de confortar a su amada angelita, tratando de demostrarle de que la amaba y que nunca se iría de su lado.
Entonces, llegó la noche. Una hermosa noche de Luna Llena que brillaba en todo el bosque.
Él finalmente recuperó los ánimos a su amada angelita...y no pudo resistir las ganas de demostrarle cuanto la amaba.

Entonces...ocurrió.
Tuvieron su primera noche de amor puro.

A la mañana siguiente, el príncipe despertó al lado de su amada. Se sentía tan feliz de verla así, durmiendo con una sonrisa tierna y dulce por la noche que tuvieron.
La despertó con un beso y ella, antes de abrir sus ojos, se apegó a él suavemente.
Pero, cuando lo vio se sorprendió demasiado.

-Ehm...mejor vete en el espejo - le dijo.

Y eso hizo...y casi se cae al verse con unas hermosas alas doradas a su espalda.
Miró a su amad y volvió a su cama con una gran sonrisa.

-Nunca nos separaremos...nunca más estaremos solos.

Y así fue. Nunca más se separaron y vivieron felices por toda la Eternidad.

martes, 12 de junio de 2007

Leyendas de un Sueño

"Leyendas de un Sueño" ©
Hecho por mí, en éste mismo instante...

El joven ángel despertó en medio de un amplio campo de flores. El aire estaba cargado de aromas y el pasto estaba lleno de vivos colores. Miró a su alrededor, inconciente de quien era y de donde estaba, pero intuitivamente sentía que ese era un lugar acogedor, pero no así su hogar.

Se levantó y caminó unos cuantos pasos, mientras una ligera ropa aparecía sobre su cuerpo, cubriéndolo del Sol y del viento. Volvió a mirar a su alrededor, esperando encontrar alguna clase de entrada o de salida con tal de encontrarse con alguien que pudiera explicarle lo que pasaba allí.

Caminó unos cuantos metros hacia delante y pudo ver lo que parecía una gran muralla hecha de ladrillo. Parecía antigua y muy firme; la vegetación subió por sus muros y la cubrió de enredaderas, mientras que la gran y pesada puerta de metal se abría lentamente como queriendo dejarle pasar.

Corrió hacia la salida y, cuando salió, la gran puerta se cerró secamente detrás de él. Pese al susto del portazo, caminó en lo que parecía ser un lugar completamente diferente. Estaba lleno de castillos y ángeles caminando tranquilamente de un lado a otro.

Miró bien todo lo que había alrededor suyo, caminando lentamente para no chocar ni toparse con nadie que no sea amigable. No podía recordar nada de su pasado y todo aquello le parecía un mundo completamente nuevo.
Se fijó en el castillo más cercano. Tenía unos bellos emblemas hechos en un llameante rubí, mientras un dragón rojo custodiaba tranquilamente la entrada.

Se quedó allí, mirando fijamente en los ojos del dragón hasta que sintió una mano apoyarse en su hombro. Miró a quien se paró a su lado y trató de fijarse en él. Era un ángel alto, de cabello rojo como el fuego; sus ojos sonreían con suavidad, mientras su monóculo se mantenía fijo frente al ojo izquierdo. Su túnica rojiza con bordados de hilo de cobre cubría gloriosamente su cuerpo, mientras sus braceras de cuero mantenían cierto aire de respeto y de fortaleza, a la vez que su cinturón mantenía fija una espada delgada y que representaba su jerarquía sobre los demás.

“Con que has despertado” – dijo, sonriéndole al joven ángel. – “Ven… Tengo algo que pasarte.”

Caminó hacia el gran castillo, seguido del pequeño. Todos hacían una leve reverencia hacia aquel ángel. El muchacho no comprendía por que se debía eso, pero sentía gran respeto ante aquel ángel que caminaba delante de él como si fuera un gran caballero, un héroe.

Las grebas del ángel resonaban fuertemente en las paredes de los pasillos de piedra caliza, como anunciando la llegada de su presencia.
De repente, el ángel se detuvo frente a una gran puerta de madera. El marco estaba adornado con muchos símbolos que el joven ángel no podía entender, además de una estatuilla de dragón a cada lado.

El pelirrojo se volteó a mirar al muchacho y sonrió, para luego abrir de par en par la gran puerta. Adentro estaba oscuro, a excepción de una especie de chimenea hecha con la figura de la cabeza de un dragón de piedra. Había unas cuantas figuras allí, todas con una gran capucha encima, como si fueran una especie de acólitos rezando.

El mayor se acercó al centro de la habitación, seguido por el joven ángel. Las puertas se cerraron y todas las antorchas de las murallas se encendieron de golpe. En frente de la chimenea había una especie de mesón de piedra, cubierto de runas por todos lados, el cual mantenía un antiguo grabado en el centro, como si fuera el escudo de una antigua familia.

“Ven, párate aquí” – indicó el ángel al muchacho.

Mientras el chico se paraba frente a la mesa, el mayor se paró frente al fuego como si estuviese buscando algo. Se agachó y extendió su mano dentro del fuego para sacar una llameante espada.
Se veía recién hecha, como si el metal fuera a quebrarse en cualquier momento ante el intenso calor. Aún así, el ángel tomó ésta arma con las manos desnudas y miró al chico y a la mesa.

Comenzó a recitar suavemente una especie de conjuro, mientras ponía su mano libre sobre la hoja ardiente de la espada. Uno de los ‘acólitos’ llegó con unas escamas y un rubí muy limpio y puro… Puso todo sobre la mesa y tomó una de las plumas de las alas del joven ángel.

Cuando todo estaba en su lugar, el pelirrojo clavó fuertemente la espada dentro de la piedra, atravesando todo lo que había sobre ella… Para que luego, con un intenso brillo, se mostrara limpia y completa, como si hubiera sido forjada con el mejor de los metales y por un gran maestro.
Una vez lista, el pelirrojo la tomó y la sacó de la piedra, otorgándosela al muchacho.

“Lo prometido es deuda” – le dijo, cariñosamente.

Antes de que el muchacho pudiera preguntar cualquier cosa, el mayor creó una pequeña llama en uno de sus dedos y quemó gentilmente la frente y la palma de la mano derecha del chico. Sin dolor ni quemadura, se formaron unas especies de marcas que desaparecieron casi al instante, llevándose la espada con ellas.

“Cada vez que la necesites o estés en peligro, aparecerá en tu mano” – le aclaró, haciéndole una caricia sobre la cabeza.

Hubo unos instantes de silencio hasta que sonó una fuerte trompeta. Todos en la habitación miraron alarmados en dirección a la entrada, a la vez que el ángel pelirrojo abría la enorme puerta como si fuera de juguete.

“¿Qué ocurre?” – le preguntó a un ángel que voló hacia él.

“San Rafael, un grupo liderado por San Miguel están en la entrada” – le explicó el recién llegado. – “Él pide hablar con usted. ¿Lo dejamos pasar?”

“No, dígale que voy en seguida” – ordenó Rafael.

Corrió hacia el muchacho y lo tomó de los hombros para pasárselo a uno de los encapuchados.

“Debes esconderte” – le dijo al chico. – “Se supone que no deben encontrarte… Rápido, vete” – ordenó, mientras los ‘acólitos’ se o llevaban.

Lo encerraron en una habitación en una de las torres. Unos momentos después, Rafael entró en la habitación y vio que el chico estuviera bien.

“Que bueno…” – suspiró con alivio. – “Te prometo que siempre vendré a buscarte. Por ahora, duerme… Mañana será un día largo”

Y, con ésta orden y la magia del arcángel, el chico durmió… Para despertar a la mañana siguiente en un mundo completamente diferente…

jueves, 7 de junio de 2007

Pensamientos propios de mí...

¿Por qué todo aquello que nos es lejano o ajeno es lo que nos cautiva o nos llama más la atención? ¿Cómo es posible que, sabiendo que esas cosas están "lejos de nuestro alcance", queramos tenerlas de todos modos?

Eso pienso ahora mismo, escuchando algo de música... Una música que extrañamente me pone en trance y me deja meditando sobre lo que han sido, son y serán mis sueños, mis realidades, mis frustraciones y mis pensamientos...

Pero, si lo más propio de mi escencia son mis sueños y mis profundos pensamientos de aquello que entiendo y que quiero entender más, ¿para qué seguir pensando en todo lo que significa "realidad", aún sabiendo que la realidad misma puede ser falsa y los límites pueden ser inexistentes?

No lo sé... Quizás es simplemente porque vivo en esta existencia, en donde la humanidad te obliga en cierta manera a estar dentro de sus normas y límites, aún si tú mismo puedes experimentar y lograr lo que ellos no logran.

Aún habiendo visto lo que otros no ven, habiendo sentido lo que solo se podría sentir con un supuesto "6º sentido", habiendo conocido solo a través de instintos aquellos conocimientos que nadie creería posibles o que solo un viejo pensador lograría descifrar después de muchos años... Aún pese a todo ello, vives aquí y debes abstenerte de ir más lejos, por tu propia seguridad y por seguir con aquellos que amas. - Eso me dice mi conciencia...

¿Por qué? ¿Acaso no es el sueño un mundo mejor?
Acaso no es posible demostrar que los sueños más vividos y realistas son la imagen de un mundo alterno, una dimensión que ha enviado sus motivantes ondas de vida hasta el sentido astral del alma... Todo demostrable al tratar de explicar la bifurcación inter-dimensional y la expansión universal.

Aún haciendo todo ello, sigues bajo las leyes de las 3 dimensiones, y si sobresales de ellas, la gente te tomará por un extraño y te privará de toda libertad o de toda compañía social...

Aún los seres más puros y perfectos son capaces de ser corrompidos o volverse imperfectos; del mismo modo es posible que te abandonen y te den la espalda, que te traten de antisocial cuando son ellos mismos los que te privan de la sociedad... Del mismo modo es posible que el más inocente de los ángeles sea rechazado del Cielo, aún cuando éste no ha hecho ni el más mínimo pecado.

Del mismo modo, es posible que todo lo que creo realidad no es más que una pesadilla pasajera... O que mis hermosos y torturantes sueños no sean más que eso: sueños. ¿Quién podría definir cuáles son los límites? Eso ya no me importa, pues sigo aquí.

Aún creyendo en lo que pocos creen, aún estando encadenado a una cruz que no elegí, aún estando en este mundo... Supongo que solo debo vivir, aún estando entre una vida y otra. De todos modos, es preciso dejar en claro que cada cosa surgirá a su tiempo, cada cosa la hablaré en su momento, cada pensamiento y sueño volará en el momento indicado... Y el destino final dirá cuál es mi verdadera misión, mientras sigo viviendo y decidiendo cada uno de mis caminos con cuidado y con mi viva intuición, acompañada de mi razón...

Toma del Instituto Nacional: una comedia

Así es... Ese es mi parecer de la toma del Instituto Nacional que se llevó a cabo el día de ayer.

Todos sabemos que los colegios se van tomando uno a uno lentamente y que están tratando de organizarse lo más posible. Esa no es la excepción del IN, o al menos no lo era. Nos estabamos organizando para poner todos los puntos bien claros y para luego informar a las demás escuelas con tal de que todo esté bien hecho; qui´zas sería una semana mínimo de organización, es decir, nos habríamos tomado la escuela en una semana más.

¿Y qué pasó? Apareció un grupo de anarquístas que, para variar, se tomaron el colegio sin siquiera tener las cosas bien claras o tener una buena organización. Todos los alumnos que llegaron el día de ayer a la escuela estaban indignados. Se quedaron afuera conversando de lo que se debería hacer, mientras eran acompañados por los profesores y alguno que otro carabinero. Entre esos alumnos estaba yo, mirando hacía el balcón en donde los alumnos encapuchados miraban como todo el mundo conversaba, como llegaba la prensa y etc...

Para hacer aún mayor la gracia, tiraron panfletos tratando de justificar la toma. Pero... Pusieron puros temas que no representan el pensar de la mayoría del alumnado y/o no representan nuestras mayores preocupaciones. La salud, el transantiago... Sinceramente me dije "No son más que un grupo de estúpidos... cuando leí vagamente el mal redactado panfleto.

"IN en toma. De la sala de clases a la lucha de clases" (en el cartel que estaba en el balcón)... No hay duda: una manga de estupidos anarquistas. "Hermanos de clase" (en el comienzo del panfleto)... ¿Perdón? Hermanos del alumnado. No todos somos de una misma clase social o de la clase anarquista. ¿Tanto pueden generalizar para que todos los alumnos que no tuvieron que ver con el tema paguen "el pato""?

Se nos arruinaron todos los planes. Toda organización se fue a la basura. Fue por ello que finalmente el alumnado entró y "liberó" al colegio... Pero no faltó otro grupito de tontos que se volvieron a tomar la escuela y las fuerzas especiales entraron en acción (o eso dijeron).

Realmente, en mi opinión, no puedo creer la diferencia de la cultura juvenil en el plazo generacional de un año. Si no hubiera sido porque repetí 3º medio, habría salido con los de mi generación, aquellos alumnos que tenían todo bien claro y sabían qué debían hacer o cómo... Pero ahora me encuentro con niñitos que se las dan de "sabelotodo" y que, en su gran mayoría, son solo anarquistas o rebeldes, todos inmaduros, todos desinteresados. Pero los dejo ser, no puedo andar pegándoles y regañado a todos por ser el mayor y entender mejor las cosas...

domingo, 3 de junio de 2007

Cultura Chilena, parte 2

Y bueno... Continuando lo que expuse en la entrada anterior, la cultura juvenil chilena se basa en todo lo pokemon [vease entrada anterior], es decir, la gran mayoría toma una moda o estilo solo para encajar en algún lugar o para conocer chicas.

Pero no olvidemos una de las "clases" que es la más notoria y popular actualmente: los "flaytes". Esta moda o estilo surge con base a la moda estadounidense de Rap o Hip-Hop, usando gorros un tanto ladeados, zapatillas anchas, chaquetas un tanto gruesas y pantalones un poco más abajo que la cadera. Notese que es "un poco más abajo de la cadera, pues en Chile el flayte se acostumbra a usar el pantalón prácticamente a medio muslo bajo las nalgas.

La gran mayoría de los flaytes chilenos son muy poseros, groseros, pandilleros... Además, ésta moda se propaga fácilmente en las áreas urbanas de clase media-baja o simplemente baja, pues es un estilo de moda que va contra la "moda formal" de la clase alta. Es por ello que en su mayoría son agresivos y pandilleros... Y normalmente relacionados con asaltantes, ladrones, etc.

Ésta "clase" es muy común en cualquier ciudad chilena, sobretodo Santiago. Hay algunos que se visten más al estilo "pokemon", asi que mucho ojo para identificar cuál es cuál.




La Incoerencia de la Cultura Chilena: Me estaba acordando de las modas que se reparten fácilmente entre la juventud chilena... Y recordé que, tal como están los punks, están los skinhead... Pero a esa "clase" no va éste punto, sino que... a los NeoNazis (?). De partida, los neonazis siguen los fines de los nazis: raza pura, racismo, rencor contra judíos, la clásica figura de la mujer bajo el dominio masculino, etc... Pero, esos puntos son imposibles de aplicar en Chile.

Me explico mejor: En Chile ya está la mayoría religiosa católica y no existe el
racismo; además, no existe la raza pura pues casi todos los chilenos son mestizos de la colonización española del siglo XVI aproximadamente. Entonces... Si estas cosas son tan claras, ¿para qué está ésta moda? Simplemente como un escape para la ira.

Los neonazis no son más que jovenes que tienen alguna clase de problema mental y que tienen alguna clase de trauma, lo cual les llena de ira y tratan de encontrar motivos para causas peleas, agresiones, daños, etc... Si ésta clase es tan destructiva... ¿Por qué el gobierno chileno le permite seguir existiendo? En Europa serían rápidamente eliminados por el mero recuerdo de la 2º Guerra Mundial.

sábado, 2 de junio de 2007

Algo de la Cultura Chilena

Recordando viejos amigos


Estaba hace un par de horas en la micro, volviendo a casa, cuando me fijo en un par de punks que suben y se ponen a conversar. Ello me recordó el hecho de que, normalmente en la cultura juvenil, toda cultura que proviene del extrangero se tergiversa y toma una ruta que no debe ser.

Recuerdo a un amigo que ahora se fue a estudiar a otro país por problemas de la ponderación el la PSU (más que nada porque en la prueba le fue mal, ya que el sistema de Mapiú no es muy bueno respecto a... bueno, casi todo; sobretodo en los estudios) el cual era de tendencia punk... Pero no cualquier punk "chilenizado", sino que uno como debería ser... O, al menos, eso me explicó un día.

Se supone que el punk es un movimiento que va contra el sistema, ya sea en un sentido estético o a través de la música que surgió en los años '70. Su mayor expresión fue con los Ramones, quienes expresaban la ideología punk a través de sus canciones. Ellos se demostraban con ropa y apariencia desordenada, pero también trataban de ayudar a la sociedad por medios que incomodaban al sistema del gobierno y, además, de dar donaciones a gente necesitada.

Como podrán ver... Es un tanto distinto a como se ve aquí en Chile. Mi amigo era completamente contrario a lo que se ve en las calles: simplemente se dejaba el cabello largo y usaba una ropa un tanto normal, a excepción de la chaqueta. Todo punky chilenizado está con ropa típica punk, pero ya llena de adornos puntiagudos, su mohicano y su cara de "perro malo"... En otra palabras, la expresión chilena del punk es el anarquismo casi absoluto y la violencia casi sin fundamentos. O, al menos, esa es la expresión del 75~90% de ellos.

Otra cosa es la expresión gótica. ¿Ustedes creen realmente que aquellos que se visten de góticos saben lo que significa ser realmente gótico? Aquí, en Chile, se toma principalmente con la depresión, el sanatismo, la muerte... O simplemente una moda más.

La verdadera expresión debe tomarse más por el ocultismo y/o mistisismo, además de tomar aquello que debería ser más propio de la era gótica del Renacimiento o época Moderna... Y sumarle aquello místico del vampirismo.
O sea, no vas a comparar a un chileno que se viste con una moda que está cruzada entre el gótico y el visual a un gótico-vampírico... Yo vi uno de estos últimos en la mañana en el metro. Se nota que sabía que identidad había tomado.




Visual: Dícese de aquella persona que está fascinada con todo lo que es la música moderna japonesa, o j-music, y adopta la moda de los grupos de ésta música, en su mayoría con estilos o tendencias un tanto góticos, pero solo con fines de apariencia. Tal como lo haría un otaku con alguna figura que le guste del manga/animé, un visual llevará chapas o parches de su grupo de j-music favorito.

"Pokemon": En Chile está surgiendo la clase "pokemon", la cual es simplemente gente "posera" (que está a una moda para entrar en un grupo social determinado o para conocer más mujeres). Estos se destacan por piercings, generalmente en orejas y/o boca; por ropa que destaque que estílo quiere ser; fuman por poseros, y tienen una actitud que personalmente es repugnante. Estos "bichos raros" solo son poseros... Todos (y cuando digo "todos" es porque estoy prácticamente seguro de que son todos) tienen Fotolog. Se creen hermosos y caminan con actitud de "soy genial"...




Otaku: El otaku es conocido en la gran mayoría del mundo o, mejor dicho, en cualquier lugar donde haya llegado alguna animación, comic o video-juego. Su original traducción del japonés es "fanático de...", y estos pueden entrar en cualquiera de éstas categorías: animé, manga y video-juegos. Ya que éstas cosas provienen del japón a través del mercado, ellos pueden conseguir las cosas normalmente... Pero aquello que no llega por el mercado, tratan de obtenerlo para aumentar su colección. Se les reconoce por ser algo callados y/o solitarios por ser la "aparente" minoría, además de llevar chapas y parches, o algún otro accesorio, de algún video-juego o manga/animé. En Chile se les relaciona como personas antisociales o completamente autistas, por lo que son aún más aislados.

viernes, 1 de junio de 2007

Estudiando y razonando un poco...

Pues es prácticamente eso...
Hoy en la clase de filosofía se tocó un tema que me llamó demasiado la atención; aunque debo destacar que fue un error no haber leído la guía... Habría participado más en clases xD

Se habló de un resumen que la profesora nos otorgó de "Meditaciones Metafísicas" de René Descartes, donde se pudo ver cosas que sirven de base para muchas polémicas para ciertas actitudes que existen hoy y/o para la filosofía actual... Bueno, más que nada la mía propia...

Todo se centró en tres puntos fundamentales:
- Dudas acerca de las percepciones sensoriales
- Escasa distinción entre el estado de vigilia y el sueño
- Argumentación del genio maligno

Hemos de recordar que Descartes es de la época Moderna; en otras palabras, del Renacimiento aproximadamente... Cuando la iglesia aún mantenía gran parte del poder.

Los dos primeros puntos apuntan casi directamente a la duda de qué es ficticio y qué es real, qué es posible y qué imposible, qué es mi vida y cuál es mi sueño. Está claro que ambos puntos están muy relacionados, sobretodo al saber que (científicamente hablando) el sueño y el recuerdo provienen del mismo estímulo en el mismo lugar del cerebro. Por lo tanto, esto nos trae todas las dudas de que todo aquello que llega a ser inexplicable puede ser perfectamente racional o real en ciertos puntos de vista y, sobretodo, pone en duda la existencia de un Dios controlador de tu destino o que sea creador de todo lo que es tu mundo.

Pero, claro está, hablar así es como tratar de explicar la bifurcación inter-dimensional... Solo porque tomaste una desición, creaste una dimensión paralela; solo porque creaste un mundo en tu imaginación, creaste un mundo en otra dimensión... ¿Qué es realmente la imposibilidad en un universo que se expande y toma cada una de las ondas estimulantes para crear aquellos mundos que lo llenan y asi crecer equilibradamente?

Pensar en eso pone en duda que sea Dios quien reó al universo, cuando es éste el que se expande por si mismo bajo sus propias reglas...
Aunque, claro está, no se puede poner en duda así de fácil todo lo sobrenatural cuando se vive una experiencia así una vez al menos... Yo, por mi parte, no puedo dudarlo pues lo vivo casi constantemente.

Entonces, ¿a qué va mi duda hacia Dios? Simplemente a que no es capaz de controlarlo todo como los fanáticos religiosos creen. Además, si queremos unir la ciencia con la religión, es simplemente decir que, lo que en la Biblia es un día (o, mejor dicho, para Dios fue un día), en éste mundo fueron millones de años, por los cuales pasaron miles de procesos. En ese sentido, hoy puede que sea el día 15 de la Tierra, para Dios.

De verdad... Yo no cuestionaría tanto a Dios a través de la filosofía, sino que cuestionaría más a la iglesia a través de la historia. ¿Cómo confiar en el Vaticano sí a lo largo de toda la historia ha sido un gobierno controlador y conquistador, además de corrupto en ciertas medidas y avaro en otras? Pero, bueno, no se puede pedir a cada persona que ponga esas dudas. Además, tal y como me ha dicho mi novia, es cuestión del Vaticano en sí y no de los sacerdotes que sí valen la pena; además de lo que ha dicho mi profesora de filosofía: "Según la filosofía, la religión existe porque el ser humano necesita creer en algo divino que puede ayudarle en el día-a-día [...]"

Bueno, terminando con el tema, el punto 3 (sobre el genio maligno) trata principalmente de demostrar la existencia de Dios representando una especia de científico genio que nos tiene a todos bajo sus aparatos de control mental de Realidad Virtual, haciendo que nuestra vida sea una pila de engaños y sueños que él nos programa con su súper-computadora... Algo así como la idea base de Matrix...

Quizás se pregunten: ¿Cómo es eso? ¿Si nos puso todo un tema que hizo que dudaramos de la existencia de Dios, cómo puede al final poner que sí existe?.
Eso es simple: En la época que vivió, el Vaticano trataba de hereje a cualquiera que pusiera en duda todo lo que ellos decían, es decir, lo que Dios decía, hacía, etc... Por lo tanto, puso "el genio maligno" nada más que para no morir en la hoguera...
¿Qué? ¿Se molestaron porque él hizo eso cobardemente? ¿Y qué? Aquí en Chile vivimos controlados políticamente por la iglesia y nadie se da cuenta... ¡Tonterías!